jueves, 10 de mayo de 2007

PERIODISMO, SOCIEDAD Y DEMOCRACIA

DANIEL SANTORO
“El periodismo de calidad va a subsistir a todos los cambios”

SANTO DOMINGO.- El rol de la prensa, además de informar, orientar y entretener, debe ser “el perro guardián de la democracia de los países”, esta frase es de Daniel Santoro, el periodista que durante cinco años desarrolló una investigación, sobre el tráfico de armas hacia Ecuador y Croacia que llevó tras las rejas durante seis meses al expresidente de Argentina, Carlos Menem.
Investigador, editor político del prestigioso periódico el Clarín y maestro de la Fundación Nuevo Periodismo que preside Gabriel García Márquez, Santoro, considera, contrario a lo que opinan otros, que la investigación es también un buen negocio para los medios de comunicación.
Por sus trabajos de investigación ha sido galardonado con el Premio Rey de España y el María Moors Cabot de la Universidad de Columbia, entre otros. Santoro, quien, además ha escrito ocho libros en forma conjunta e individual, estuvo en República Dominicana como expositor en un seminario organizado por Participación Ciudadana y el Colegio de Periodista. En una entrevista concedida a LISTIN DIARIO, respondió una serie preguntas con relación a su experiencia como investigador y algunas observaciones sobre el papel de la prensa en Estados Unidos y Latinoamérica
P.-Hay muchos trabajos que pueden llenarlos de satisfacción. Esa investigación sobre el caso del ex presidente Carlos Menem puede ser uno de ellos?
R.- Sí, sin lugar a dudas, porque uno siempre debe tener una buena historia basada en datos comprobables, que tenga una repercusión social y judicial. Aunque, bueno, hay veces que uno encuentra una buena historia y los jueces “cajonean” las investigaciones judiciales y todo termina y no vale la pena el esfuerzo que uno hizo.
Y en éste caso de tráfico de armas de Argentina a Ecuador y Croacia en el gobierno de Menem, en base a investigación mía en El Clarín, se armó una causa judicial y en el año 2001 el ex presidente Carlos Menem estuvo preso durante seis meses por decisión de un juez, obviamente, por estar involucrado en el tráfico de armas Argentinas a Ecuador y Croacia.
P.-En el marco de esas investigaciones, ha recibido amenazas e intimidación en su país?
R.- Primero tengo que aclarar que Argentina tuvo cien periodistas desaparecidos en la época de la dictadura y desde que se reestableció la democracia en 1983, hay garantías individuales. Un solo periodista fue asesinado en esa época, José Luis Cabezas, en 1997, y, aclarado eso, bueno.. he recibido amenazas anónimas de muerte cuando seguía el caso de el tráfico de armas a Ecuador y Croacia. He recibido también intento de soborno. El abogado de uno de los traficantes de armas me ofreció 50 mil dólares para que dejara de investigar. Bueno, yo preferí seguir siendo un periodista pobre pero honesto. La forma de presión más grande que hay en Argentina es la de los juicios por difamación o injuria, que, realmente, no tienen elementos como para que hayan sido difamados. Los investigados, los funcionarios, usan eso como una herramienta de presión y como intento de desprestigios contra los periodistas.
P.- Y el resto de los periodistas que realizan trabajos de investigación en Argentina, reciben el mismo tratamiento. ¿Son amenazados e intimidados?
R.- Bueno, Argentina no es Colombia, que tiene cien periodistas asesinados, ni México, que tiene más de diez. Entonces, por eso te digo que hay garantías individuales. Sin embargo, obviamente, que se asume mucho riesgo y son pocos los periodistas que se animan a afrontar juicios, a ser sometidos a escarnios públicos. Por ejemplo, a mí, por investigar a unos Servios que tienen un casino acá en República Dominicana y que están presos en Argentina ahora acusados por supuesto narcotráfico, me jaquearon mis correos electrónicos y ensuciaron mi nombre a través de notas difamatorias en Internet. Entonces, hay que tener un cuero, poder resistir ese tipo de presiones a que uno se expone. Pero, en definitiva, vale la pena hacer periodismo de investigación.
P- ¿La crisis económica en Argentina afectó en algún momento la libertad de prensa?
R. La afectó indirectamente en la medida en que había menos recursos financieros y muchos medios redujeron sus redacciones y solamente han quedado como equipos de investigación periodística permanente uno en El Clarín, otro en el diario El Perfil y uno en el canal 13. Los demás han sido disueltos. Sin embargo, todavía hay periodistas que individualmente siguen haciendo investigaciones en particular. Aunque, en general, los grandes medios al quedar con grandes deudas en dólares fueron más vulnerables a las presiones de los gobiernos.
P.- ¿Cómo ve el periodismo en América Latina?.
R.- Bueno, yo creo que es un periodismo que está en una búsqueda y un esfuerzo por mejorar. Ahora, eso depende con quién nos comparamos. Si nos comparamos con el periodismo de Estados Unidos o nos comparamos con el periodismo de Francia, Italia, España, estamos muchos pasos atrás y tenemos que hacer un enorme esfuerzo, sobre todo, en materia de periodismo de investigación.
Son pocos los dueños de medios que se dan cuenta que el periodismo de calidad, que una de sus manifestaciones es la investigación, es también un buen negocio, en la medida que le da credibilidad, pese a que signifique el gasto de tener que sacar a un periodista de la redacción y tenerlo un mes, dos o seis meses trabajando para un tema específico. Eso tiene, obviamente, ventaja para el diario en cuanto a su credibilidad. Sobre todo, en estos tiempos en que está en juego la credibilidad de los medios. Como, por ejemplo, yo gané un premio internacional en España y eso es una ventaja enorme para el diario frente a la competencia y a los lectores, mostrarles que tiene periodistas prestigiosos que ganan no premios locales, que pueden estar sospechosos, sino premios elegidos por jurados internacionales.
P.-En los países donde los medios de comunicación están en manos de pocos grupos, ¿ es más difícil hacer estos trabajos?
R.-Sin lugar a dudas. En la medida en que hay más pluralidades de ideas, de opiniones y competencias periodística, hay más alternativas.
Pero tampoco tenemos que justificarnos y decir: no podemos hacer nada porque los dueños nos lo prohíben, nos ponen obstáculos. Por ejemplo, debe hacer una cuota de voluntad en todo esto, de poner las horas libres que tengamos a investigar, a buscar documentación en los archivos y ahora existe la tecnología que nos permite tener un blog que es una cosa barata y uno puede publicar. Además, el mejor soporte que hay para la investigación periodística son los libros, publicarlas como libros. Porque las investigaciones periodísticas son realmente notas muy largas y necesitan muchos datos e información y los espacios son limitados en los diarios, sin hablar de la televisión.
En cambio, en un libro de 300 páginas tenemos amplitud para escribir lo que queramos, no tenemos dueños, son nuestros, no tenemos editores, no hay que volver a repetir el background de la historia porque el lector lo tiene y puede ir y venir. Entonces, creo que se puede hacer periodismo de investigación sabiendo hacerlo y sin tener que estar trayendo a relucir los obstáculos y con un enorme esfuerzo de voluntad personal trayéndolo como un proyecto propio.
P.-¿Con esta revolución de medios en Internet, cree que es una ventaja para que los periodistas realicen trabajos de investigación, sobre todo, porque menos limitaciones de espacio que en los periódicos impresos?
R.- Si, sin lugar a dudas hay ventajas enormes porque los periodistas pueden tener su propio blog, buscar su financiamiento. Ahora, no es tan fácil decir que el periodismo de calidad se va a trasladar de grandes medios a un blog. Para tener un periódico de calidad hay que hacer una inversión grande, entonces, uno puede publicar las investigaciones pero, realmente, hay que hacerlo a largo plazo y hace falta sostén financiero.
Todavía no se sabe cuál va a ser el futuro soporte de los medios, ¿van a seguir existiendo los medios de papel?, no sé. ¿ Van a haber diarios que se reciban en un teléfono celular? No sé. Eso varía como el día a día, sin embargo, el periodismo de calidad va a subsistir a todos los cambios de los soportes, el periodismo basado en la investigación, la narración conectando a las sociedades con conductas éticas.
P. El periodismo de los Estados Unidos pasó la prueba con la Guerra de Irak?
R.-Yo creo que está en una crisis muy grande, por haber difundido la mentira de Bush de que había armas de destrucción masiva en Irak y eso ha dañado el modelo de prensa norteamericano. En la prensa norteamericana hay muchos medios, con Fox a la cabeza, que han pasado a tomar partido y hacen propaganda a favor del gobierno de Bush con la invasión a Irak. Sin embargo, el periodismo norteamericano no es el periodismo de los últimos diez años, tiene una historia bien rica. En un caso u otro uno puede tomar todavía elementos de ese modelo y del modelo de presa de Francia y demás para adaptarlo a la realidad de nosotros en América Latina.
P.¿Hay limitación en los Estados Unidos en cuanto a libertad de prensa?
R. Yo veo la autocensura y presiones del gobierno de Bush en cuanto a las informaciones que están enviando sobre la guerra de Irak y también es preocupante que algunos jueces hayan empezado a pedir que los periodistas revelen los nombres de sus fuentes de información anónimas, esto sucedió en el caso de Judith Miller, la ex reportera de The New York Times, donde, también, lo que pareció como una defensa terminó siendo que una periodista en lugar de hacer su rol de independiente estaba jugando a favor de determinado funcionario a lo interno del gobierno de Bush.
¿En sentido general, usted ve algún aporte que está haciendo la presa a favor de la democracia de los diferentes países?
Yo creo que el rol fundamental de la prensa debe ser no solamente informar, orientar y entretener, debe ser el perro guardián de la democracia, el cuarto poder, el controlador de poder para aportar a favor de la transparencia pública. No existe como una corriente general sino que hay intentos de medios y grupos de periodistas que avanzan para tratar de reunificar la profesión del periodismo en América Latina.
P.¿Usted ve alguna mano oscura, por llamarlo así, que esté detrás del periodismo en Latinoamérica para que no juegue su rol?
Históricamente los gobierno de turno han sido una mano oscura que presionan de forma directa e indirecta para que los medios no sean independientes, no creen su propia agenda de temas y sean una máquina que no hace más que repetir el discurso del presidente de turno.
Hay presiones con la publicidad oficial, no dándoles información a los periodistas que no consideran confiable, como pasa con el presidente en Argentina. Hay una lasitud ética de parte del periodista, que en la mañana tiene el traje de periodista y en la tarde son asesores o relacionistas públicos del mismo funcionario que son su fuente de información.
Y, hablando del asunto del narcotráfico, que bueno, en el norte de México, por sobrevivencia física, los medios se autocensuran porque no hay libertad como para que un periodista pueda informar sobre casos de narcotráfico porque son asesinados.
Con toda la experiencia que tiene en el periodismo de investigación. ¿Tiene alguna exhortación a los periodistas dominicanos que quieren incursionar en el área?
No sólo que el periodismo de investigación vale la pena. porque muchas veces creemos que todo lo que denunciamos tiene que tener una consecuencia judicial y que alguien caiga preso y demás, porque los jueces cajonean las causa, porque hay poderosos que están detrás de esos temas para que no toquen sus intereses, pero siempre deben luchar, por la verdad y estar detrás de ella porque la verdad siempre triunfa, en un plazo más corto o más largo, pero, para eso, hay que capacitarse porque el periodismo es el mejor oficio del mundo como dice García Márquez pero también es un oficio que fosiliza conocimientos. Y la revolución tecnología tiene tantos conocimientos que si nos quedamos con los conocimientos que aprendimos en la facultad, perdemos el tren en la revolución tecnológica y los avances culturales.
Capacitarnos como profesionales, tener normas éticas más estrictas, para poder preservar nuestra independencia ante todas esas manos negras que quieren tratar de hacernos callar la boca.
P. ¿Está ahora embarcado en alguna investigación específica?
R.-Mi técnica es tener siempre varias investigaciones paralelas y la que está más dura es la que publico. Por ejemplo, en Buenos Aires, en Argentina, hay un sistema de obra social, un sistema médico gratuito que se llama PAMI que siempre fue la caja negra de la política y yo, con la ayuda de un fiscal, conseguí la historia de un ordenanza, de un empleado de menor jerarquía dentro del Estado, que después del gobierno de Ménem pasó a ser multimillonario, y esa historia, que tuvo una repercusión mediática muy grande, hizo que este ordenanza, que se hizo millonario con la obra social de los jubilados, ahora está investigado por la justicia. Esa fue la última investigación que hice .
Pero recomiendo no contar el tema que estás investigando porque cuando se enteran los investigados se multiplican los problemas y los obstáculos que tienes para conseguir la información.
Su perfil Es editor de la revista de la sesión política del diario El Clarín. Miembro y fundador del equipo de investigación del diario El Clarín. Maestro de la fundación de Gabriel García Márquez e imparte clases de periodismo de investigación también en la maestría que tiene el diario El Clarín en Buenos Aires y en la carrera de grado que tiene la universidad de Belgrano de Buenos Aires.
Es licenciado en Comunicación Social egresado de una universidad del Estado, la Universidad Nacional de la Plata, y desde el año 1990 trabaja para el diario El Clarín especializado en temas judiciales y en investigación de casos de corrupción.
Ha ganado varios premios entre ellos el premio internacional del Rey de España, segundo premio de la Fundación de García Márquez, ha ganado el premio Maria Moors Cabot de la Universidad de Columbia entre otras distinciones, todas en periodismo de investigación. Ha escrito ocho libros de forma individual y conjunta.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario