HECTOR RODRIGUEZ PIMENTEL AFIRMA PROCEDIMIENTO FUE CORRECTO

COMITÉ DE HIDROELÉCTRICAS WWW.hoy.com.do
Explican por qué decidieron desaguar presa

Héctor Rodríguez Pimentel
POR LEONORA RAMÍREZ S.Si el Comité de Operación de Hidroeléctricas (COH) hubiese vertido 80 millones de metros cúbicos de agua de la presa de Tavera, en las 24 horas anteriores al paso de la tormenta Olga, o si hubiese dejado que esta se desbordara y se rompieran sus compuertas, Santiago y la Línea Noroeste habrían desaparecido.
Así lo aseguró Héctor Rodríguez Pimentel, director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), quien defendió el procedimiento adoptado por los técnicos de ese comité, con la finalidad de evitar peores inundaciones y una mayor cantidad de víctimas tras la crecida del río Yaque del Norte y sus afluentes.
El funcionario manifestó que las decisiones que se tomaron están contenidas en el manual de instrucción del COH.
El desfogue de la referida hidroeléctrica provocó el desbordamiento del Yaque del Norte, y en consecuencia la inundación de las zonas bajas de Santiago, así como de comunidades del Bajo Yuna y la Línea Noroeste.
Sobre ese aspecto Rodríguez Pimentel expresó, en el programa radial “El Gobierno de la Mañana”, que el manual de operaciones establece que si el desagüe sobrepasa los 500 metros cúbicos por segundo se producirían inundaciones en Santiago, por lo que en principio se vertieron 100 metros cúbicos por segundo.
POR QUÉ SE TOMÓ LA DECISIÓN
Al preguntársele por qué se desfogó la presa la madrugada del miércoles, expresó que la tormenta Olga produjo 51 millones de metros cúbicos de agua en la cuenca del Yaque del Norte, lo que representa volúmenes aproximados de 340 milímetros, que son la tercera parte de agua que cae cada año en esa cuenca.
“Eso hizo que a la presa comenzara a entrar un flujo de 6,300 metros cúbicos por segundo, una cantidad sin precedentes en el manejo de esa hidroeléctrica, de hecho, durante la tormenta Noel sólo cayeron 800 metros cúbicos por segundo”.
La crecida del Yaque del Norte provocó la muerte de más de 20 personas, según el Centro de Operaciones Especiales (COE), así como cuantiosos daños a la agricultura.
LOS CUESTIONAMIENTOS
Varios expertos, entre esos Silvio Carrasco, exdirector del INDRHI, atribuyen un manejo inadecuado de la presa de Tavera ante las lluvias provocadas por la tormenta Olga, una perturbación atmosférica que se desarrolló fuera de la temporada ciclónica que concluyó el 30 de noviembre.
Con relación a las críticas, el funcionario explicó que el nivel máximo de altura del embalse es de 327.50 metros, y cuando se anunció la tormenta, el lunes 10 de este mes, tenía 325.09 metros de agua almacenada.
“Los que critican dicen que cuando comenzó la tormenta esa hidroeléctrica debió desaguarse rápidamente en 24 horas, pero hacer eso significaba verter cinco metros que significan alrededor de 80 millones de metros cúbicos de agua, para llegar al momento del fenómeno a 900 metros cúbicos por segundo, y esa cantidad de agua se habría llevado a Santiago, La Vega, Montecristi y Valverde.
“Pero si las lluvias no se hubiesen producido también lo habrían criticado porque Tavera es vital para el acueducto de Santiago, para la generación de electricidad y la agricultura”.