Hoy es el mejor momento
"El cáncer de mamas es un crecimiento maligno del tejido mamario. Nadie sabe con certeza cómo una célula normal se vuelve cancerosa, pero durante su vida, una de cada ocho mujeres será diagnosticada con esta enfermedad".
Detectar a tiempo el cáncer de mamas aumenta las probabilidades de superarlo y es la mejor defensa contra este terrible padecimiento. Encontrarlo antes de que se propague puede salvar tu vida.
El cáncer de mamas es el cáncer más frecuente en la población dominicana, por encima del cáncer de cáncer de cérvix. Son varios los factores que aumentan el riesgo de una mujer padecer cáncer de mamas.
El cáncer de mamas es el cáncer más frecuente en la población dominicana, por encima del cáncer de cáncer de cérvix. Son varios los factores que aumentan el riesgo de una mujer padecer cáncer de mamas.
Estos son: Edad: mayor de cuarenta años; historia familiar: dos o más familiares de primera línea (abuela, madre, hermanas) que padezcan cáncer; hábitos alimenticios incorrectos y hasta factores medioambientales; haber padecido cáncer; diagnóstico de enfermedades premalignas (cáncer in situ hiperplasia atípica).
Actualmente la mamografía es el método de detección más eficaz para encontrar el cáncer en sus primeras etapas.
El 19 de octubre se conmemora en todo el mundo el Día Mundial del Cáncer de Mamas, y en el Despacho de la Primera Dama(DPD), queremos recordar esta fecha especial haciendo posible que cada vez menos dominicanas sean víctimas de este mal.
Practicarse auto exámenes de seno regularmente es una excelente forma de prevenir la enfermedad a tiempo, el examen de un médico entrenado permitirá diagnosticarla. Los especialistas recomiendan una sonomamografía anual para las mujeres por debajo de los 35 años y una sonomamografía y una mamografía cada seis meses a partir de los 35 años.
Mujer dominicana, te invito a formar parte de esta batalla por la vida, hazte una mamografía totalmente gratis (con previa cita) en el centro de atención que hemos dispuesto a partir de hoy en las instalaciones del Hospital Central de las Fuerzas Armadas, hoy es el mejor momento. Por la tranquilidad tuya y de tu familia, haz tu cita ya. "
Dra. Margarita Cedeño de FernándezPrimera Dama de la República
¿Qué es el cáncer de mamas?
Dra. Margarita Cedeño de FernándezPrimera Dama de la República
¿Qué es el cáncer de mamas?
El cáncer de mamas consiste en un crecimiento anormal y desordenado de las células de éste tejido, ocasionado por una mutación o alteración de un gen. Las células alteradas proliferan hasta conformar el tumor, en forma de nódulo o masa, el cual, en el caso de la mama, puede ser palpable mediante el autoexamen o por parte del médico, o tan pequeño que requiera medios especiales de diagnóstico como la mamografía.
Con la aparición de esta enfermedad se desarrollan células cancerosas en los tejidos de la mama. La glándula mamaria se compone de varios racimos de lóbulos y lobulillos conectados mediante unos conductos delgados, a modo de ramas de un árbol, en estos conductos se desarrolla el cáncer de mamas más frecuente que es el cáncer ductal, el otro tipo de cáncer de mamas es el carcinoma lobular.
Factores de riesgo
Un factor de riesgo es todo lo que incrementa las probabilidades de enfermar. Como factores de riesgo en general se conocen aquellas circunstancias que hacen que una persona tenga mayor tendencia o proclividad a sufrir una enfermedad. En el caso del cáncer de la mama hay factores que se consideran como de alto riesgo entre ellos:
Edad superior a los 45 años
Inicio de la menstruación antes de los once años de edad
Menopausia tardía
No haber tenido hijos o tener el primero después de los 30 años
Una administración prolongada de terapia de reemplazo hormonal
La ingestión inmoderada de alcohol
Antecedentes familiares de cáncer de seno o de otro tipo
Obesidad y presencia de genes predisponentes.
Existe una predisposición familiar que se trasmite a través de los genes (en los cromosomas), siendo el 5% al 10% de todos los casos del cáncer de transmisión hereditaria. Otro factor que predispone al cáncer de mamas es el uso de los anticonceptivos hormonales.
La prevención más eficaz del cáncer de mamas es la detección precoz y por ello la autoexploración de las mamas de forma periódica, es fundamental. Además a partir de los 40 años, y antes, si existen factores predisponentes familiares, se deben realizar de forma periódica (anualmente) una exploración llamada mamografía. Esta detecta pequeños tumores que pueden pasar desapercibidos en la autoexploración.
¿Qué es la mamografía?
Una mamografía es una prueba hecha para observar algunas anomalías o problemas en los senos de la mujer. Para realizar el examen se utiliza una máquina especial de rayos X que toma una fotografía de ambas mamas. El resultado es grabado en una película que el especialista puede examinar.
Con la mamografía se pueden ver los cambios que una mujer no puede sentir cuando se hace el autoexamen. Si se encuentra alguna anomalía el médico ordena una biopsia donde una pequeña muestra es tomada del área afectada.
Cuando acuda a realizarse una mamografía es preferible que use una ropa adecuada (blusa o camiseta). Si tiene en su poder mamografías anteriores llévelas al radiólogo para que conozca su historial.
¿Cómo se toma una mamografía?
La persona que hará la mamografía la ubicará con los senos encima de una placa conectada a la máquina de mamografía, luego bajará otra placa que presionará el seno causando una ligera molestia que no es dolorosa.
¿Quienes deben practicarse el examen?
Las mujeres que sobrepasan los 35 años deben practicarse una mamografía anualmente. Deben comenzar a hacerse la prueba a edad temprana las que tengan un historial familiar de cáncer de seno, el médico puede ayudar a determinar la frecuencia con que debe hacerse la mamografía.
Si nota manchas o ve cambios en sus senos hable de inmediato con su doctor o doctora, no importa la edad que tenga.
Auto examen paso a paso
¿Cómo hacerlo?
En la ducha: Levante el brazo y póngalo detrás de la cabeza. Con la mano enjabonada, haga pequeños movimientos circulares buscando algún abultamiento.
Frente al espejo: Inspeccione sus senos con los brazos a los lados del cuerpo. Luego suba los brazos y busque cualquier cambio en cada seno: hinchazón, cambios en la piel o en el pezón. Examine las axilas presionando suavemente.
Acostada: Ponga una almohada debajo de los hombros. Levante el brazo, haga movimientos circulares en el seno, siguiendo la dirección de las manecillas del reloj, buscando algún abultamiento o dureza. Exprima ligeramente el pezón y vea si hay secreción.
El mejor momento para examinarse
Con la menstruación, hágalo una semana después de tenerla, cuando sus senos no estén sensibles ni hinchados. En la menopausia, hágalo el primer día de cada mes.
Como practicarse el auto-examen de los senos
Nota: Debes examinar tus senos una vez al mes, asi esta practica llegara a convertirse en un habito para ti.
Se realiza una semana tras el inicio de la menstruación
Sitúate frente a un espejo y observa tus senos, primero con los brazos colgando libremente, luego con las manos presionando la cintura (esta maniobra contrae el músculo pectoral) y finalmente elevándolos por encima de la cabeza.
Observa tus senos para detectar ;
Diferencias entre una y otra mama,
Alteraciones en el tamaño, en la forma en el contorno de cada seno (bultos, durezas, retracciones del pezón)
También observa la piel para ver si presenta ulceración, eczema, etc.
¿Existe alguna alteración en la mama, modificación de la piel, o en los pezones?
Debes realizarla acostada porque en esta posición los músculos están relajados y se facilita la palpación. Si vas a examinar la mama derecha primero debes colocar una pequeña almohada bajo el hombro derecho, a su vez el brazo de este lado debes elevarlo y situarlo detrás de la cabeza a nivel de la nuca.
Después, con los tres dedos centrales juntos y planos de la mano izquierda, realiza movimientos concéntricos o espirales alrededor de la mama, presionando suave pero firmemente con las yemas de los dedos y efectuando movimientos circulares en cada punto palpado, desde la periferia de la mama hasta el pezón, y en el sentido de las agujas del reloj.
Luego realiza movimientos verticales, para ello desplaza la mano para arriba y para abajo, cubriendo toda la mama. Después, realiza los movimientos de cuadrantes, en los cuales la mano se desplaza desde el pezón, a la periferia de la mama y se regresa, hasta cubrir todo el seno.
En la misma posición debes palpar la axila correspondiente a la mama que estas explorando, para descartar la aparición de bultos; para ello desplaza la mano a lo largo de toda la axila realizando movimientos circulares de la mano en cada posición, la presión que has de ejercer con los dedos debe ser levemente mayor que en el caso anterior.
En la misma posición debes realizar la palpación de la aureola y el pezón, presionando el pezón entre los dedos pulgar e índice. Observa si al presionar existe algún tipo de secreción. También levanta el pezón junto a la aureola para comprobar si existe buena movilidad o adherencia.
Nota: Si presentas alguna anomalía , no te asustes porque puede ser benigna, sim embargo debes acudir inmediatamente al medico.
Señales que no debe ignorar
Cuando se haga el autoexamen del seno cada mes, busque los siguientes cambios en la manera como se ven o se sienten sus senos y sus axilas. Si nota alguno de ellos, acuda donde su médico inmediatamente.
Una masa dura o piel más gruesa (como una cáscara de naranja) en cualquier parte del seno
Hinchazón, calor, oscurecimiento o enrojecimiento que no desaparece
Cambio en el tamaño o la forma del seno
Picazón, dolor, escama en la piel o sarpullido en el pezón
Hundimiento del pezón o de otras partes del seno
Secreción sanguinolenta del pezón
Dolor en un sitio que no varía con su ciclo mensual
Factores de riesgo
Un factor de riesgo es todo lo que incrementa las probabilidades de enfermar. Como factores de riesgo en general se conocen aquellas circunstancias que hacen que una persona tenga mayor tendencia o proclividad a sufrir una enfermedad. En el caso del cáncer de la mama hay factores que se consideran como de alto riesgo entre ellos:
Edad superior a los 45 años
Inicio de la menstruación antes de los once años de edad
Menopausia tardía
No haber tenido hijos o tener el primero después de los 30 años
Una administración prolongada de terapia de reemplazo hormonal
La ingestión inmoderada de alcohol
Antecedentes familiares de cáncer de seno o de otro tipo
Obesidad y presencia de genes predisponentes.
Existe una predisposición familiar que se trasmite a través de los genes (en los cromosomas), siendo el 5% al 10% de todos los casos del cáncer de transmisión hereditaria. Otro factor que predispone al cáncer de mamas es el uso de los anticonceptivos hormonales.
La prevención más eficaz del cáncer de mamas es la detección precoz y por ello la autoexploración de las mamas de forma periódica, es fundamental. Además a partir de los 40 años, y antes, si existen factores predisponentes familiares, se deben realizar de forma periódica (anualmente) una exploración llamada mamografía. Esta detecta pequeños tumores que pueden pasar desapercibidos en la autoexploración.
¿Qué es la mamografía?
Una mamografía es una prueba hecha para observar algunas anomalías o problemas en los senos de la mujer. Para realizar el examen se utiliza una máquina especial de rayos X que toma una fotografía de ambas mamas. El resultado es grabado en una película que el especialista puede examinar.
Con la mamografía se pueden ver los cambios que una mujer no puede sentir cuando se hace el autoexamen. Si se encuentra alguna anomalía el médico ordena una biopsia donde una pequeña muestra es tomada del área afectada.
Cuando acuda a realizarse una mamografía es preferible que use una ropa adecuada (blusa o camiseta). Si tiene en su poder mamografías anteriores llévelas al radiólogo para que conozca su historial.
¿Cómo se toma una mamografía?
La persona que hará la mamografía la ubicará con los senos encima de una placa conectada a la máquina de mamografía, luego bajará otra placa que presionará el seno causando una ligera molestia que no es dolorosa.
¿Quienes deben practicarse el examen?
Las mujeres que sobrepasan los 35 años deben practicarse una mamografía anualmente. Deben comenzar a hacerse la prueba a edad temprana las que tengan un historial familiar de cáncer de seno, el médico puede ayudar a determinar la frecuencia con que debe hacerse la mamografía.
Si nota manchas o ve cambios en sus senos hable de inmediato con su doctor o doctora, no importa la edad que tenga.
Auto examen paso a paso
¿Cómo hacerlo?
En la ducha: Levante el brazo y póngalo detrás de la cabeza. Con la mano enjabonada, haga pequeños movimientos circulares buscando algún abultamiento.
Frente al espejo: Inspeccione sus senos con los brazos a los lados del cuerpo. Luego suba los brazos y busque cualquier cambio en cada seno: hinchazón, cambios en la piel o en el pezón. Examine las axilas presionando suavemente.
Acostada: Ponga una almohada debajo de los hombros. Levante el brazo, haga movimientos circulares en el seno, siguiendo la dirección de las manecillas del reloj, buscando algún abultamiento o dureza. Exprima ligeramente el pezón y vea si hay secreción.
El mejor momento para examinarse
Con la menstruación, hágalo una semana después de tenerla, cuando sus senos no estén sensibles ni hinchados. En la menopausia, hágalo el primer día de cada mes.
Como practicarse el auto-examen de los senos
Nota: Debes examinar tus senos una vez al mes, asi esta practica llegara a convertirse en un habito para ti.
Se realiza una semana tras el inicio de la menstruación
Sitúate frente a un espejo y observa tus senos, primero con los brazos colgando libremente, luego con las manos presionando la cintura (esta maniobra contrae el músculo pectoral) y finalmente elevándolos por encima de la cabeza.
Observa tus senos para detectar ;
Diferencias entre una y otra mama,
Alteraciones en el tamaño, en la forma en el contorno de cada seno (bultos, durezas, retracciones del pezón)
También observa la piel para ver si presenta ulceración, eczema, etc.
¿Existe alguna alteración en la mama, modificación de la piel, o en los pezones?
Debes realizarla acostada porque en esta posición los músculos están relajados y se facilita la palpación. Si vas a examinar la mama derecha primero debes colocar una pequeña almohada bajo el hombro derecho, a su vez el brazo de este lado debes elevarlo y situarlo detrás de la cabeza a nivel de la nuca.
Después, con los tres dedos centrales juntos y planos de la mano izquierda, realiza movimientos concéntricos o espirales alrededor de la mama, presionando suave pero firmemente con las yemas de los dedos y efectuando movimientos circulares en cada punto palpado, desde la periferia de la mama hasta el pezón, y en el sentido de las agujas del reloj.
Luego realiza movimientos verticales, para ello desplaza la mano para arriba y para abajo, cubriendo toda la mama. Después, realiza los movimientos de cuadrantes, en los cuales la mano se desplaza desde el pezón, a la periferia de la mama y se regresa, hasta cubrir todo el seno.
En la misma posición debes palpar la axila correspondiente a la mama que estas explorando, para descartar la aparición de bultos; para ello desplaza la mano a lo largo de toda la axila realizando movimientos circulares de la mano en cada posición, la presión que has de ejercer con los dedos debe ser levemente mayor que en el caso anterior.
En la misma posición debes realizar la palpación de la aureola y el pezón, presionando el pezón entre los dedos pulgar e índice. Observa si al presionar existe algún tipo de secreción. También levanta el pezón junto a la aureola para comprobar si existe buena movilidad o adherencia.
Nota: Si presentas alguna anomalía , no te asustes porque puede ser benigna, sim embargo debes acudir inmediatamente al medico.
Señales que no debe ignorar
Cuando se haga el autoexamen del seno cada mes, busque los siguientes cambios en la manera como se ven o se sienten sus senos y sus axilas. Si nota alguno de ellos, acuda donde su médico inmediatamente.
Una masa dura o piel más gruesa (como una cáscara de naranja) en cualquier parte del seno
Hinchazón, calor, oscurecimiento o enrojecimiento que no desaparece
Cambio en el tamaño o la forma del seno
Picazón, dolor, escama en la piel o sarpullido en el pezón
Hundimiento del pezón o de otras partes del seno
Secreción sanguinolenta del pezón
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