jueves, 30 de julio de 2009

Insulza desea mediar en tensión andina


El secretario general de la OEA exhortó al diálogo entre los gobiernos de Venezuela y Colombia

El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, aseguró este miércolesque está dispuesto a mediar en el nuevo enfrentamiento entre Colombia y Venezuela.

Además, Insulza exhortó al presidente Hugo Chávez a que no retire al embajador venezolano en Colombia, como amenazó el mandatario este martes, tras la revelación de que unos lanzacohetes de fabricación sueca comprados por Caracas han sido encontrados en manos de las FARC.

"Hago un llamado al diálogo para que se resuelva con espíritu de conciliación y en ningún caso tomar medidas que afectarían a mucha gente, estamos hablando de una relación comercial y económica que no es menor y de gente que va y viene entre los dos países", afirmó el diplomático chileno en Costa Rica donde participa en la XI Cumbre presidencial del mecanismo de Tuxtla.

"Nosotros estamos dispuestos, por cierto, a ejercer nuestros buenos oficios si se nos pide", añadió Insulza.

El titular de la OEA dijo estar muy preocupado por la tensión que ha aumentado en las relaciones entre los dos países latinoamericanos debido a revelaciones sobre supuestos vínculos de Caracas con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

"Creo que el camino siempre entre los países de América debe ser el diálogo", agregó.

Insulza lamentó además que en la región latinoamericana "al menor problema" se retiran los embajadores.

El colaborador de la BBC en San José, Gilberto Lopes, indicó que el secretario general de la OEA espera poder conversar en las próximas horas durante la cumbre en Costa Rica con Uribe acerca de la presente tensión con Venezuela.

Recalentamiento

Muchos han señalado que este recalentamiento del conflicto andino ocurre poco después de que se revelara que Washington y Bogotá están cerca de firmar un acuerdo que permitirá a militares estadounidenses operar en al menos tres bases colombianas.

La semana pasada, el gobierno venezolano anunció que comprará tanques de guerra a Rusia para duplicar su flota y proteger la frontera con Colombia.

El 20 de julio pasado, la revista británica especializada en defensa Jane's Intelligence Weekly publicó que el ejército colombiano había incautado un número indeterminado de lanzacohetes antitanque en campamentos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que podrían haber sido vendidos originalmente por un fabricante sueco al ejército de Venezuela.

Pocos días después, las autoridades suecas pidieron explicaciones al gobierno venezolano por los supuestos desvíos a las FARC de las armas que le había vendido a Venezuela.

En respuesta, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció una campaña "sucia y vulgar" contra su país que intenta justificar el posible acuerdo militar entre Colombia y EE.UU.

Ivan Briscoe, analista de la Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior (FRIDE) de Madrid indicó a BBC Mundo que si el gobierno colombiano logra confirmar que existen -o existieron- vínculos de colaboración o cooperación entre los gobiernos de Venezuela y Ecuador con las FARC, Uribe podría usar ese elemento para afianzar su relación con el nuevo gobierno de EE.UU.

"Uribe podría usar la evidencia creciente de la internacionalización de las FARC para decir que él es el par de manos más confiable en este país, haciendo de la lucha contra las FARC su propósito central", afirmó Briscoe.

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